En la industria no sólo existe el reto de alcanzar las metas de producción y calidad de los productos, sino que también existe la prioridad de mantener a salvo las instalaciones, equipos y sobre todo al personal. Las catástrofes como las explosiones, fugas de componentes tóxicos e incendios suelen tener su origen en algo tan común como los mismos materiales y equipos que se manejan en nuestras instalaciones.
En el caso de los incendios, hay un sinfín de causas que los desatan. Tan solo por listar algunas tenemos el efecto lupa, reacciones químicas producidas por el calor del sol o producidas por el mismo material, negligencia humana, equipos eléctricos y mecánicos, e insólitamente a veces la misma naturaleza, ya sea el viento o la fauna local, provocan esa chispa o traen consigo una brasa que desencadena la devastadora reacción del fuego.
Las 9 principales causas de incendios industriales. Fuente: Safestart México
Sea cual sea su causa, el incendio tiene su origen en un punto caliente. La clave para frenarlos es detectarlos en su etapa más temprana, cuando el daño y la dificultad para extinguirlos son mínimos.
La detección de puntos calientes siempre será más anticipada a la detección del humo o flama. En nuestro video (del minuto 16:00 al 18:00) podemos ver como la cámara termográfica tarda solo 12 segundos en detectar el punto caliente, el humo se detecta después de 1 minuto con 19 segundos y la cámara CCTV detecta la flama después de 1 minuto con 45 segundos.
Habiendo explicado el principio anterior podemos entender por qué la cámara termográfica toma relevancia para los sistemas contra incendio. La capacidad de detección va desde los 100mK (0.1 ° C) hasta los 30mK (0.03 ° C), que para hacernos una idea, es capacidad suficiente para detectar durante 30 segundos la huella de una mano que se posó durante medio segundo sobre un escritorio ¿Increíble, no?
¿Y cómo se usan? De acuerdo al plano del área que se va a monitorear se hace la designación de ubicación de la cámara, buscando aprovechar al máximo el campo visual ofrecido por la cámara. Es común que nos topemos con una situación en la que una cámara no es suficiente debido al nivel de detalle requerido o bien a los puntos ciegos obtenidos al ubicar la cámara en cierta posición.
El tamaño del área a monitorear no siempre determina el número de cámaras a utilizar. En el lado izquierdo, tenemos un almacén de 80 × 40 metros mientras el de la derecha es de 200 × 100 metros. El primero requiere un nivel de monitoreo más minucioso, incluidos todos los pasillos mientras que para el segundo con la superficie superior y lateral de las pacas es suficiente.
Si bien dentro de los sistemas de detección temprana de incendios la cámara termográfica es la coprotagonista necesita también de los demás elementos del sistema para alertar al cuerpo de vigilancia o bien accionar automáticamente las válvulas de diluvio para apagar el fuego. El otro coprotagonista es el software, más específicamente el bcbFireScan, que se encarga de recibir la señal de las cámaras y orquestar todos los demás elementos, como lo son las plataformas pan-tilt, los módulos de señales discretas, pantallas, tableros, etc. El bcbFireScan se encarga de ejecutar el modo ronda, una rutina de inspección en la que las plataformas pan-tilt permiten apuntar las cámaras a los distintos cuadrantes del área monitorizada. Además, gracias al sus algoritmos de procesamiento, el bcbFireScan es capaz de detectar falsas alarmas originadas por los montacargas que circulan constantemente por los almacenes.
Toda inversión es importante y su aprobación está sujeta a un adecuado retorno de la inversión. Si bien es cierto que al prevenir un incendio (y con ello evitar daños a la propiedad, equipos, personal, cadena de producción y multas) el sistema estaría más que pagado, no tenemos que esperar a que eso suceda para ver amortizada la compra. Esto sucede porque por el hecho de contar con un sistema de estos el seguro hace una importante reducción en el costo de la póliza, permitiendo así un cálculo del ROI más cuantificable.
La NFPA, organismo máximo en materia de sistemas contra incendio, reconoce la utilidad e importancia de los sistemas termográficos en la NFPA 072, capitulo 17, sección 8 donde se menciona la utilización de detección de incendios por sensores de energía radiante, es decir, cámaras termográficas. Además, en la NFPA 1801 capítulos 6 y 7 se describen las características técnicas que se deben cubrir para su fabricación y aprobación.
